Probablemente, fue la última mezquita erigida en Aragón. La de Tórtoles (a menos de un kilómetro de Tarazona) es una de las obras más tardías de la cultura mudéjar en la Península y uno de los pocos ejemplos conservados de mezquita musulmana construida en época cristiana. No en vano, está catalogada como Patrimonio Cultural Aragonés y es la mejor conservada de la comunidad autónoma.
A pesar de ser una construcción modesta, la decoración de la techumbre forma uno de los conjuntos iconográficos y epigráficos de carácter mudéjar, más excepcionales e interesantes del territorio aragonés. Se trata de una ornamentación típica de esta clase de edificaciones, en la que destaca la ausencia de cualquier representación de seres vivos por suponer un desafío impío a la capacidad creadora de Dios. (“Él es el único que existe por sí mismo y que puede crear vida”). La decoración se reduce a palabras en árabe, aunque, debido a la lejanía de Tarazona con los centros de poder islámico, la escritura aparece con diferentes proporciones a las habituales. Además, por la inconexión de las frases, se deduce que empezaba a dejar huella el olvido debido al paso del tiempo: “la amaba y odiaba la ignorancia en tiempos que sobre los días era victorioso más bien como Egipto”. Pero hay algo que destaca especialmente dentro de esta decoración de la techumbre, y es la representación de temas iconográficos (aves, hojas, escudos, estrellas de seis puntas, lacerías, rosetas y coronas) y epigráficos con caligrafías árabes, muy inusuales en las mezquitas musulmanas.
La mezquita de Tórtoles es una aljama sencilla, debido a que la población de este barrio de Tarazona era de muy bajo poder adquisitivo (musulmanes que vivían dentro del dominio político cristiano). Pero cuenta con todos los elementos característicos de la estética islámica:
- El haram (o sala de oración): es la sala principal de la mezquita. Más ancha que larga, de acuerdo con el ordenamiento de la oración colectiva.
- El muro de la quibla: es el que cierra la sala de oración y está orientado hacia La Meca.
- El mihrab: es una hornacina que en las mezquitas indica la dirección del rezo. Es el único arco de herradura de todo el edificio. Demuestra la lucha de las comunidades musulmanas por mantener sus raíces culturales dentro de una sociedad cristiana, ya que este tipo de ojiva, es característica de la arquitectura mudéjar.
- El mimbar: es el único elemento que no se conserva en la Mezquita de Tórtoles, pero sí hay evidencias de que existió. Es un púlpito elevado con escaleras, sobre el que se sitúa el imán durante la predicación de los viernes. Se coloca a la derecha del mihrab, en un hueco que sí que existe hoy en día en este templo islámico del barrio de Tarazona.
Sin embargo, se echan en falta evidencias de la existencia de otros elementos, como el alminar (torre donde el almuédano llamaba a la oración), el patio exterior (sahn), con la fuente para las abluciones, o el patio interior para las mujeres.
DE MEZQUITA A IGLESIA
Con la llegada de los Reyes Católicos, los musulmanes se vieron obligados a una reconversión forzosa: “O daban su alma a Dios, o no eran dignos de la Corona”. Todas las mezquitas fueron convertidas en iglesias. La de Tórtoles se dedicó a la Anunciación de la Virgen. Ella fue la protagonista de este nuevo templo cristiano, junto al Arcángel San Gabriel, personaje también reconocido en el Islam como portador de la revelación divina al profeta Mahoma. Se cree que esta elección no fue algo baladí, sino que se eligió precisamente por esta “conexión” entre ambas religiones.
RESTAURACIÓN
Tras varios siglos de abandono de la iglesia y modificaciones del edificio para su utilización en muy dispares actividades, el Centro de Estudios Turiasonenses dio a conocer este monumento tras hallar restos de lo que parecía ser un mihrab y encontrar varias piezas de madera pintadas. A partir de este descubrimiento, se pusieron en marcha varios procesos de restauración a instancias del Ayuntamiento de Tarazona con la financiación de la Comarca de Tarazona y el Moncayo a través del Plan de Competitividad Turística. Y la restauración de la mezquita de Tórtoles, se da por finalizada en el año 2015.
En la actualidad, y gracias a un convenio firmado entre el Ayuntamiento de Tarazona y la Fundación Tarazona Monumental, la mezquita abre las puertas al público para que pueda ser disfrutada como una parte más del extenso patrimonio de la ciudad.
