Aunque no hay datos que demuestren una vinculación directa entre Tarazona y el emperador Carlos I de España y V de Alemania, en la fachada del Ayuntamiento de esta ciudad se venera su figura con un minucioso friso de 32 metros. Se comenzó a esculpir en 1558, fecha de la muerte del monarca, por lo que su construcción pudo estar motivada por el deseo de rendirle homenaje y conmemorar dignamente su fallecimiento.
El friso es una representación de la cabalgata triunfal de Carlos V y el Papa Clemente VII tras la coronación del emperador en Bolonia. Fue realizada por Alonso González, quien también realizó la decoración esculpida y la grisalla del cimborrio de la Catedral de Santa María de Huerta, y para su creación tomó como referencia una serie de 38 grabados realizados por Nikolas Hohenberg, pintor y grabador al servicio de la regente Margarita de Austria.
Esta imponente pieza, que sobresale a lo largo de toda la parte superior de la fachada del Ayuntamiento de Tarazona, está trabajada en yeso, un material muy utilizado en el siglo XVI, que refleja el peso de la tradición artística mudéjar.
De él caben destacar varias escenas, como el gran festín celebrado tras la cabalgata, en el que, por desgracia, el buey del que estaban dando buena cuenta ya no puede apreciarse a causa de su deterioro. También se puede distinguir a Antonio de Leyva, capitán del ejército del emperador, que, debido a su invalidez, aparece en una silla con andas. Más adelante, y bajo un espectacular palio decorado con el águila imperial, el Papa Clemente VII y Carlos V avanzan montados a lomos de sus caballos. El cortejo lo cierran un grupo de magnates, también a caballo, que pasan con sus sirvientes por un gran arco del triunfo al que sigue una especie de puerta de muralla por la que reaparece el cortejo.
El friso del Ayuntamiento es tan importante para la ciudad que una vez al año se recrea esta entrada triunfal de Carlos V en Bolonia, y los habitantes de Tarazona participan de las diferentes actividades perfectamente ataviados con la indumentaria típica de la época.
El Ayuntamiento de Tarazona está ubicado en la plaza de España de la localidad, punto vital de encuentro para el inicio de las fiestas patronales de la mano del Cipotegato, Fiesta de Interés Turístico Nacional. Gracias a esta emblemática y colorista figura, cada 27 de agosto esta plaza (y su Ayuntamiento) se proyecta nacional (e internacionalmente) gracias a los múltiples medios de comunicación que se hacen eco de la lluvia de tomates que cae sobre el Cipotegato.
Información Jornadas Coronación y Feria Renacentista 22 y 23 junio 2019
